Consejo: Austria gana
El encuentro en el Ernst-Happel-Stadion decidirá quién asegura la clasificación directa al Mundial, y el conjunto local llega con una posición claramente ventajosa. Austria lidera el grupo con 18 puntos y ha mostrado una estabilidad notable en toda la fase clasificatoria, respaldada por una diferencia de goles de 21:3 que refleja solidez tanto ofensiva como defensiva. La actuación reciente contra Chipre fue una demostración de control absoluto, ya que el rival no registró ningún disparo a puerta, lo que refuerza la consistencia defensiva del equipo. Con seis partidos consecutivos en casa sin derrota, Austria mantiene una línea de regularidad significativa, mientras que la combinación ofensiva de Arnautovic, Sabitzer y Schmid garantiza amenaza constante. La versatilidad táctica de Laimer permite al entrenador Rangnick equilibrar perfectamente la estructura defensiva y del mediocampo, apoyada por la fiabilidad del dúo Schlager–Seiwald. Bosnia y Herzegovina llega tras vencer a Rumanía, pero se benefició de la expulsión rival y en el duelo anterior cayó 1–2 ante Austria. Aunque el conjunto visitante suele obtener buenos resultados fuera de casa, la obligación de ganar aumenta la presión, mientras que Austria muestra mayor forma, calidad y control emocional. A pesar de que a los locales les basta un empate, el rendimiento general de la clasificación sugiere que un triunfo austriaco es el escenario más probable.
Consejo: Portugal U21 gana
El duelo en Hradec Králové enfrenta a un combinado checo debilitado por importantes ausencias con un equipo portugués que ha dominado claramente la fase clasificatoria. Los anfitriones jugarán sin Paluska, Hunal, Šín y Kričfaluši, lo cual reduce la solidez defensiva y la capacidad de controlar la posesión. Los últimos partidos de la República Checa han evidenciado dificultades en la combinación y en la transición ofensiva, particularmente visibles contra Bulgaria y Serbia. Portugal llega con una trayectoria impecable: cuatro victorias y un balance total de 21:0, lo que subraya su enorme calidad y profundidad de plantilla. Futbolistas como Rodrigo Mora, Mateus Fernandes, Gustavo Sá, Quenda y Roger aportan técnica, ritmo y experiencia en ligas de gran nivel. La selección checa probablemente se incline por un planteamiento defensivo, pero mantener el ritmo ante un rival tan fuerte puede resultar complicado. Portugal destaca por una organización superior, una construcción ofensiva fluida y una alta efectividad en zonas de definición. Considerando todos los datos disponibles y la diferencia de nivel entre ambos equipos, la victoria portuguesa aparece como la opción más probable.